Flujo de sensaciones

El aroma de la noche
en tus hombros desnudos, se siente tan bien.
El marco de tu felina mirada
desnudándome con la vista, me excita en demasía.
Tu voz en mi mente,
gimiendo entregada, desata un intenso temblor...




No quiero que mires mi vida,
toda la vida a través de tus ojos,
porque eventualmente, te aburrirías.


No me importa exhibirte,
mientras me importe el desnudarte,
porque sería sensualidad, y también hastío.


No voy a desposarte,
mientras me pidas a gritos, violentamente poseerte,
porque toda voz se apaga con cada marcha del reloj.




Sólo quiero seguir oliendo tu perfume en mis manos,
y proseguir jugando con tu cabello mientras te beso completa:
algunos buscan el futuro, y otros hallan el pasado...


conformémonos con hacer eyacular al presente,
saboreando cada gota, en cada instante, en cada día.